A
veces el rumor del mar te habla.
Son
momentos en los que necesitas recogerte, el frío, la lluvia y el
viento se han apoderado de tu interior y al sentir el rumor del mar,
notas que te comprende, que te ayuda y que tienes un camino para
continuar.
Necesitas
una mirada, un abrazo sin preguntas que responder y decides que por
duro que sea el camino, no vas a perder la ilusión ni dejarás de
soñar.
Que
nadie te podrá quitar tu esperanza y seguirás en la búsqueda de tu
sueño.
Os
espero con mis historias, todo comenzó con “Mi lugar. Mi pequeño
sueño”, que nos llevó a “Siempre habrá un lugar para soñar”,
y descubrir “Donde está tu destino” porque “Esta noche volveré
a buscarte”.
El maestro sigue el camino de la literatura
ResponderEliminarEnhorabuena
Un abrazo
Gracias querido amigo, disfruto escribiendo y tengo la suerte de tener grandes lectores como tú.
EliminarOtro gran abrazo.